Misery de Stephen King

Paul Sheldon es un escritor que sufre un grave accidente y recobra el conocimiento en una apartada casa en la que vive una misteriosa mujer, corpulenta y de extraño carácter. Se trata de una antigua enfermera, involucrada en varias muertes misteriosas ocurridas en diversos hospitales. Fanática de un personaje de una serie de libros que él ha decidido deja de escribir, está dispuesto a hacer todo lo necesario para "convencerlo" de que retome la escritura. Esta mujer es capaz de los mayores horrores, y Paul, con las piernas rotas y entre terribles dolores, tendrá que luchar por su vida. Un relato obsesivo y aterrador, que solo Stephen King podía ofrecernos.

Ficha técnica: Traducción: María Mir DeBolsillo ISBN: 978-8497595353 376 págs 8,95 €

Hacía bastantes años, no me acuerdo cuando fue la última vez que leí algo de este género, y menos de Stephen King, lo que si que me acuerdo de haber leído libros suyos en inglés pero muy reducidos que me dejaron muy buen sabor de boca.

Quizás este libro me pilló en una época que no estaba muy animada para leer algo de terror, me hubiera resultado algo menos intenso y violento, no me ha gustado tanto como me esperaba o es que mis expectativas para esta novela eran muy altas. Algunas de sus partes las he acabado por odiar y otras no he parado de leer porque eran un enganche total.

Cuando empiezas a leer te preguntas: ¿Me he perdido algo? hasta que llevas unas cuantas páginas leídas te das cuenta de lo que realmente está ocurriendo pero al principio parece que el protagonista desvaría en sus pensamientos, y más adelante, sus reflexiones son complejas de seguir dependiendo de las situaciones que vive, además de entrelazar hechos del pasado con lo que esta viviendo. Son algo confusas para el lector, a veces es difícil distinguir entre lo que está pasando en ese momento o lo que está pensando.

Lo verdaderamente escalofriante es Annie Wilkes. Paul Sheldon es un famoso escritor gracias a los libros sobre Misery Chastain, mientras conducía hacia la costa oeste de Estados Unidos sufre un accidente. Cuando se despierta descubre que no está en un hospital sino en casa de Annie Wilkes a pesar de sus graves heridas. Paul se da cuenta que por los cuidados y las medicinas que le suministra, Annie es enfermera, poco a poco se va dando cuenta de que su vida corre un gran peligro.

Lo primero que hace sospechar a uno es, porque no está en un hospital, ya mal asunto y tu ya estas cagadita expectante a lo que vaya ocurrir. Sin duda, la gran estrella de este libro es Annie, sino fuera por ella no habría libro. Vamos conociendo a Annie en pequeñas dosis, pero cuando aparece te deja sin respiración, nunca sabes lo que va a suceder porque es toda una sorpresa. Sus "pequeños" cambios de humor son casi palpables y es cuando en esos momentos le estás gritando a Paul que se calle, no lo puedes evitar. King nos muestra una mujer muy difícil de comprender, se desconoce lo que verdaderamente pasa por su cabeza.

He echado de menos algo más suspense en algunas partes, incluso conocer con más detalle porque era así Annie o porque hacía las cosas que hacía. Paul, en cambio, me ha parecido un sufridor nato, muchos no aguantarían lo que ha sufrido. por no morderse la lengua

Stephen King ha escrito una historia más allá del fanatismo, con un extremo mortal y espeluznante. Annie no os dejará indiferentes pero que a nadie le gustaría tener como enfermera. Es una aterradora historia donde una obsesión puede con todo.